En nuestro aprendizaje del pensamiento, utilizamos en el ámbito matemático dos programas, uno de aritmética mental y el otro de resolución de problemas. Con ambos potenciamos imaginación, el rendimiento académico, la creatividad, la memoria visual, la concentración, la habilidad para la observación, y la capacidad de análisis y síntesis.
Además, se incluye en el aprendizaje matemático un objetivo general prioritario dentro de cada curso que asegure la consecución de hábitos de trabajo claros, productivos y acumulativos por curso, trabajando de manera exhaustiva la competencia básica: Aprender a Aprender. Todo ello va desde, en Primero a manipular objetos y realizar dibujos para ayudar en la resolución de operaciones y/o problemas, hasta aprender a razonar los problemas, escrita y verbalmente, para analizar nuestro pensamiento matemático.